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¿Cómo afrontar 5 desafíos diarios?
- junio 4, 2024
- Publicado por: Graciela Large
- Categoría: Metodo Large
Liberarse del dolor, la frustración, el esfuerzo, la desmotivación y el apego, los cinco desafíos
La humanidad se ha polarizado yendo de un extremo a otro para casi todo. Ya sea, por ejemplo, exaltando o recreando el dolor; o en el polo opuesto, negándole hasta un punto en que es imposible abrirnos a una mirada interior. Ambos extremos no consiguen resolver el primer desafío diario que cada mañana: liberarnos del dolor y nacer a la confianza.
¿Cómo vivir con confianza para que la vida no sea un dolor?
La pregunta nos inquieta nada más abrir los ojos, aunque tengamos consciencia de ello, o ninguna. Despertamos sin ningún compás de espera por la presión que ejercen los otros 4 desafíos, que asaltan nuestra cotidianidad a medida que avanzan las horas.
Sin confianza, ¡cuánto nos presionan las circunstancias, sintiéndonos inseguros!
Pero la presión asfixia todavía más con las relaciones. Las personas testan nuestra paciencia y tolerancia, y es posible que no mantengamos una motivación genuina, que aporte claridad y optimismo a la hora de tomar decisiones, sorteando contratiempos, haciendo posible terminar la jornada, para dejar en ese día lo que no funcionó, y mañana, ¡empezar de nuevo!
5 desafíos que provocan en nosotros interés o apatía.
En cualquier caso, es imposible no sentir su reclamo, aunque ninguno de nosotros haya oído hablar de las estaciones de la naturaleza y su influencia en el ser humano.
Cada mañana poder con la vida, o no, es una cuestión de confiar en que tenemos las condiciones para ello, como cualquier ser vivo.
Cuando los desafíos se complican las circunstancias miden ¿cuánta capacidad tenemos de confiar en nuestro propio poder para afrontar el día?
Cualquier duda de confianza nos impide caminar por los otros cuatro desafíos, aunque en muchas ocasiones pretendamos arreglar los cimientos de la casa por el tejado, pretendiendo arreglar, sin éxito, la toma de decisiones o la motivación.
¡Comprobado!, sin resolver el primer desafío, que es la confianza, perdemos impulso vital hasta caer en la ansiedad o angustia permanentes.
¿Cómo saber que estos 5 desafíos no se abordan? ¿Encuentras aquí alguna de tus soluciones?
- Evadirnos de lo que nos duele.
- Hay cero capacidades de gestión frente a la frustración.
- Negamos el esfuerzo, al sentirnos martirizados por los retos.
- No sabemos afrontar las equivocaciones como errores que se puedan corregir.
- Y nos domina la impaciencia, impidiendo dejar atrás y aceptar la muerte, como una transformación diaria
En definitiva, la confianza, el pilar fundamental
Toca asumir con ganas este primer desafío. La confianza es esencial para empezar el día sin miedo. ¡Atención! El miedo opera como un virus que de inmediato nos desconecta de nuestra fuerza y sobre todo de la voluntad. El miedo anula la vitalidad. Es tan importante la confianza, que sin ella, nos volvemos vulnerables al aislamiento y la inseguridad.
La construcción de la confianza es un proceso gradual que requiere constancia. Sobre todo cuando en nuestra infancia no conseguimos superar la sensación de carecer de ella. El mejor antídoto para restaurarla es vernos con valores, que propician un criterio personal de vida. Su beneficio inmediato le vemos en el cuerpo, que se vigoriza con la fuerza que dan esos valores, que no son otra cosa que pensamientos de identidad. De esta manera alineamos nuestra energía a un pensamiento concreto.
Pensar que yo soy un valor: determinación, por ejemplo; hace que las células del cuerpo se alineen al significado de ese pensamiento en forma de frecuencia.
Sintonizamos simbólicamente creando condiciones sutiles que a medida que las ejercitamos, se convierten en una identidad con la que podemos afrontar el día con confianza.
Investigación: un estudio realizado por la Universidad de Harvard encontró que la confianza en las relaciones interpersonales está estrechamente relacionada con la satisfacción y la felicidad general. Las personas que confían en los demás tienden a ser más resilientes y a tener una mejor salud mental.
Este dato nos muestra la relación que existe entre un pensamiento de confianza, y la posibilidad de llevarnos bien con otros, sin que sean un impedimento para nuestros deseos o propósitos.
Va a ser muy difícil que tengamos tolerancia hacia otras personas si hay desconfianza, al despertarse de inmediato la sensación de que nos quitan algo.
Si me digo que soy carente de confianza, la aceptación de la diversidad será un ejercicio cargado de prevención. Es más, experimentaré los deseos de otras personas como una amenaza. Percibiré que me culpan a través de sus deseos, o que esas personas consiguen cosas a mi costa. Seremos víctimas de nuestra propia percepción limitada que nos dice carecer de lo que otros sí tienen.
Tolerancia: aceptar y respetar las diferencias
El segundo desafío es la tolerancia. En un mundo diverso y globalizado, la tolerancia es vital para la convivencia pacífica. Ser tolerante no significa aceptar todo sin cuestionar, sino respetar las diferencias y aprender de ellas.
Ahora bien, cuando una persona tiene una confianza construida puede responsabilizarse de los procesos diarios de la vida, sin que sean una extorsión el contraste, cuando otras personas lo pongan a prueba. Logrará liberarse de circunstancias que le oprimen. Tendrá recursos que organiza de tal forma que le permiten innovar sobre los procesos, y conseguir cooperar con otras personas para que estos sean más eficientes.
Investigación: El Instituto de Psicología Positiva de la Universidad de Pensilvania ha demostrado que las personas que practican la tolerancia experimentan menos estrés y disfrutan de relaciones más saludables. La tolerancia promueve una mayor comprensión y empatía hacia los demás.
Practicar la tolerancia implica escuchar activamente y considerar las perspectivas ajenas sin prejuicios. Es un proceso continuo de aprendizaje y adaptación.
La ausencia de tolerancia nos lleva criticar constantemente todo y a todos, sin darnos cuenta que es una consecuencia de no vernos competentes para la vida. La tapadera de la intolerancia será manipularnos para que nadie descubra la crítica abierta, o encubierta, que es una forma de esconder la poca autoestima y el desconocimiento de nuestras posibilidades de desarrolla más potentes.
En estas circunstancias, la motivación es una asignatura imposible. Así que el paso de llegar al medio día es una inmolación diaria. Para la mayoría la opción es: ¡me abstraigo!, aguantandando con placeres o entretenimiento, que parecieran aliviar lo que conocemos como rutina.
Motivación: el impulso para ser y lograr nuevos retos
El tercer desafío es la motivación. Sin motivación, es difícil superar los obstáculos y alcanzar ser nosotros mismos mientras conseguimos nuestros objetivos. La motivación nos impulsa a actuar y a mantenernos enfocados en nuestras metas.
Una motivación requiere haber construido con naturalidad la confianza y la responsabilidad. Porque quien tiene motivación conoce muy bien con qué se quiere comprometer, sin que el esfuerzo sea algo que poco a poca le abruma hasta limitarle. Pensando que es un fraude, o un impostor de sí mismo.
Investigación: Según un estudio publicado en Psychological Bulletin, la motivación intrínseca, que surge de un interés personal genuino, es más efectiva que la motivación extrínseca, basada en recompensas externas. Las personas motivadas intrínsecamente son más perseverantes y logran más en la vida.
Para mantener la motivación, es útil establecer metas claras y descomponerlas en pasos manejables. Celebrar los pequeños logros en el camino también ayuda a mantener el entusiasmo.
Optimismo: actuar con lealtad a uno mismo para dejar de ver el vaso medio vacío
El cuarto desafío es el optimismo. El optimismo no es negar los problemas, sino enfrentarlos con una actitud que ve los errores como oportunidades de optimizar, crecer en el excelencia y desarrollar áreas de mejora personal. No es algo exclusivo para procesos laborales. Es la clave para poder realizarnos personalmente.
Durante el día, cuando avanza la tarde, percibimos que muchas cosas no se hicieron. Aunque no hayamos cumplido con todo lo programado, saber encontrar la mejora y el aprecio por lo realizado es la clave del optimismo diario.
Investigación: La Clínica Mayo ha encontrado que el optimismo está asociado con una mejor salud física y mental. Los optimistas tienden a vivir más tiempo, tener menos enfermedades crónicas y disfrutar de una mayor calidad de vida.
Cultivar el optimismo puede lograrse a través de prácticas como mantener un diario de revisión de aciertos y errores, para desarollar un plan de mejora que se ponga en práctica al día siguiente. También ayuda rodearse de personas optimistas que nos inspiran a implementar estrategias efectivas.
Desapego: la libertad de soltar
El quinto y último desafío es el desapego. El desapego no significa indiferencia, sino la capacidad de soltar lo que no podemos controlar, y aceptar la impermanencia de la vida. Sin esto es imposible empezar al día siguiente. De lo contrario, el peso de lo que nos llena de pesadumbre y culpa paralizará al día siguiente la voluntad de vivir.
Investigación: Un estudio de la Universidad de California, Berkeley, encontró que las personas que practican el desapego emocional son más resilientes y menos propensas a la depresión y la ansiedad. El desapego nos ayuda a aceptar los cambios, la transformación, y vivir descubriendo qué es el presente.
Practicar el desapego puede implicar aceptar que el cambio es una constante en la naturaleza que nos ayuda a vivir con mayor serenidad.
Enfrentando los desafíos con estrategias concretas
Para abordar estos cinco desafíos, podemos implementar estrategias prácticas en nuestra vida diaria:
- Diario de Reflexión: Mantén un diario para escribir sobre tus experiencias y emociones. Esto te ayudará a identificar en qué puedes, cuánta tolerancia desarrollas, cómo crece tu motivación, y qué áreas de mejora y, sobre todo celebrar tus progresos.
- Mindfulness y Meditación: Practicar mindfulness y meditación puede ayudarte a mantenerte presente y consciente de tus pensamientos y emociones.
- Establecer Metas Claras: Fija metas claras y alcanzables. Descomponer estas metas en pasos más pequeños y celebrar cada logro.
- Grupos de Apoyo: Rodearte de personas que compartan tus valores y aspiraciones puede proporcionar el apoyo necesario para mantener la motivación y la confianza.
- Educación Continua: Busca aprender continuamente sobre estas cualidades y cómo cultivarlas. Participar en talleres y leer libros sobre desarrollo personal puede ser muy beneficioso.
Ten presente que los 5 desafíos son ineludibles. Igual que cada día sale el sol, hay nubes que dan paso a la claridad. Cada persona transita por ellos. La diferencia está en descubrir su influencia viendo cómo afectan nuestros estados internos. ¿Qué beneficio tiene esto? Estableceremos fáciles conexiones entre las circunstancias, los problemas e imprevistos, con el desarrollo de tu persona en cada uno de los 5 desafíos. No lo dudes, tu propia evolución depende de lo que haces cada día. Es el viaje del héroe, ¡que eres tú!
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